viernes, 29 de enero de 2016

Al final de tu año como au pair

Parece que me he dedicado a acumular sentimientos y experiencias por muchos meses para tener el valor de escribir. Me he envuelto en mis felicidades y problemas que he dejado esto atrás. Quizás nunca fue lo mío. Quizás sólo es un recurso para volver así, cada tantos meses y descargar todo eso que mis sentidos han capturado.

Después de más de 11 meses como au pair las cosas se ven muy distintas. Sí, lo leí en varios blogs y varias au pairs me lo comentaron en sus despedidas. Sin embargo, vivirlo es diferente, es cierto que ya no soy la misma y también es cierto que en muchos sentidos sí lo soy. Me gustaría poder decir que regresa otra Adriana a casa, totalmente renovada, sin una sombra de las tristezas o preocupaciones que antes tenía porque "Hoy es una nueva persona gracias a este año de tantas y tantas experiencias" pero no puedo. Muchos tormentos me persiguen y la única diferencia es que hoy tengo más herramientas, aún no estoy segura si serán para enfrentar a los miedos que ya existían pero, al menos, a los nuevos que lleguen sé que tengo más opciones para no dejarlos entrar.

Estoy feliz del año que he vivido, Conocí a muchas personas buenas. Fue mi año de viaje, lo que quería para mí. Doy gracias por este año.

En tres semanas estaré viajando a mi casa a esta misma hora. Estoy muy emocionada de regresar pero, también tengo miedo, algo nuevo viene, ¿cómo no tener miedo? Además, la situación laboral en mi país no es la mejor, en fin, a mantener las esperanzas sino ¿cómo?

Vuelvo a un mundo nuevo, nuevo porque ya no se ve igual. 

Regresar es el principio de mi siguiente viaje y por eso ya estoy agradecida.