miércoles, 16 de septiembre de 2015

Cuando vas a la mitad de tu año

Inicié este blog como un registro de lo que iba a estar haciendo en mi año como Au pair, lamentablemente es muy fácil dejarlo abandonado. Admiro mucho a aquellas que mantienen su blog actualizado y con muchas sugerencias así como entradas sobre sus experiencias. En fin, el blog es para mí y aunque siento que he ido documentando todo en mis redes sociales, a veces sigo teniendo estas ganas de escribir.

Ya a la mitad del año las cosas se ven diferentes, estás más que asentada con tu familia y sabes de sus gustos y costumbres, pero al mismo tiempo te empiezan a cansar cosas que quizás al principio parecían excitantes o que no te molestaban, creo que siempre pasa, la rutina hace que algunas cosas sean cansadas. Siento que estoy en una excelente etapa con mi hostfamily y con mis hostchildren, me siento más cómoda con ellos y muy tranquila en casa. 

Los últimos meses se han pasado muy rápido, ya voy por mi séptimo mes, más de la mitad de mi año, parece que todo va tan de prisa y al mismo tiempo a veces todavía pesan los siguientes meses que quedan, aun cuando estoy disfrutando mucho mi año, extraño un poco a mi familia y, sobre todo, mi independencia. En mi país yo ya solía vivir sola desde que estudié la Universidad y ahora es incómodo avisar cada que voy a salir o pedir prestada la camioneta (como adolescente de nuevo), esto es lo que más me ha pesado y lo que anhelo para cuando regrese.

Fuera de allí, todo ha estado muy bien. Algunos problemillas con mi novio por la distancia, ya que no es sólo este año el que estaremos lejos, él trabaja para una empresa española y viaja mucho, lo veía en México cada 3 meses, ahora cada 6 por mi año de au pair, no sé qué pasará cuando regrese. La distancia hace todo más difícil, complica las cosas y emocionalmente es una carga muy pesada. Me quiero concentrar en los buenos momentos que tenemos juntos pero aún así no verlo y saber que regresaré y él no estará me hace extrañarlo todavía más.

Hoy en día el problema de las relaciones no es tanto si existe o no amor es si nuestra vida profesional nos permitirá llevar a la par una relación amorosa exitosa. Somos una generación mucho más egoísta que la de nuestros padres y por eso, a veces es más fácil estar solo. Hoy en día el problema no es el amor, la cuestión es el egoísmo y las oportunidades profesionales; esas son las que separan a las personas.